Se llevó a cabo el primer capítulo de dos encuentros entre México y Colombia en la categoría femenil, un duelo que se presentó como un verdadero desafío para ambas selecciones. El Tricolor demostró su capacidad para competir contra un adversario que, a pesar de ser considerado uno de los mejores del continente, terminó por empatar sin goles.
Desafío continental: una prueba de carácter para el Tricolor femenil
Este partido fue significativo no solo por la rivalidad en el terreno de juego, sino porque Colombia ostenta el puesto 18 en el ranking mundial, mientras que México ocupa el lugar 29. Esto hacía que el enfrentamiento no solo fuera una prueba de fortaleza, sino también de determinación para el equipo dirigido por Pedro López.
Nombres como Linda Caicedo, destacada jugadora del Real Madrid, aumentaban la expectativa y el nivel del reto para las futbolistas mexicanas.
Ciudad Juárez se rinde ante la pasión del fútbol femenil
El Estadio Olímpico Benito Juárez, ubicado en Ciudad Juárez, fue testigo de este evento, que reunió a 7,789 fanáticos dispuestos a apoyar a la selección nacional femenina en su primera aparición en este campo. Desde el inicio, las jugadoras entraron con la clara misión de neutralizar el ataque colombiano, que se estaba preparando para la Copa América.
Linda Caicedo, junto a Manuela Pavi del West Ham de Inglaterra, generaron varias oportunidades que pusieron a prueba a la portera Esthefanny Barreras y la defensa mexicana.
Barreras y Tapia brillan en un duelo de arqueras y oportunidades desperdiciadas
A lo largo del primer tiempo, a pesar de las oportunidades de gol de ambas selecciones, se respiraba una tensión palpable en el aire. Si bien el triángulo de Alice Soto, Jacqueline Ovalle y Kiana Palacios generó sus propias chances de anotar, la portera colombiana, Katherine Tapia, se mostró firme, manteniendo el marcador en ceros.
El segundo tiempo inició con más emociones. Linda Caicedo volvió a mostrar su talento y habilidad, creando peligro en el área mexicana. Sin embargo, la defensa se mantuvo alerta. Al ingresar Charlyn Corral, México empezó a mostrar un estilo más aguerrido y comprometido. En una de las jugadas más prometedoras, Kiana Palacios estuvo cerca de romper el empate, pero su tiro se fue desviando, lo que mantuvo la presión en el aire.
Corral y Palacios encendieron las esperanzas mexicanas en la segunda mitad
El encuentro continuó, y a pesar de que Colombia intentó imponer su juego, la Selección Mexicana Femenil no se dejó abrumar. Se notó una mejora notable en la comunicación y cohesión del equipo.
Rebeca Bernal, además de desempeñarse como defensora sólida, se aventuró al ataque, dejando claro que el Tricolor tiene talento y voluntad para competir en un nivel elevado.
México deja buenas sensaciones y se alista para el segundo asalto en Zacatepec
A medida que el tiempo se agotaba, la noticia de que Caicedo había sido sustituida trajo un suspiro de alivio a la afición mexicana, aunque la lucha seguía en el campo. Así, el partido culminó con un resultado de 0-0.
A pesar de la falta de goles, la actuación de México fue una clara señal de que están en el camino correcto hacia las eliminatorias mundialistas.
El próximo encuentro entre ambos equipos está programado para el 2 de julio en Zacatepec, donde se espera que la intensidad y la competitividad se mantengan, brindando otra oportunidad para que el equipo mexicano muestre su crecimiento y preparación. La afición está ansiosa, sabiendo que cada partido es una oportunidad para soñar con un futuro brillante en el fútbol femenil.
