El debut de Nicolás Larcamón en el Apertura 2025 con Cruz Azul resultó ser una frustrante presentación para los fans celestes. En un encuentro que prometía emociones, la realidad fue un 0-0 contra Mazatlán en Ciudad Universitaria que dejó muchas dudas.
La expectativa por los nuevos refuerzos se desvaneció rápidamente en medio de un mar de imprecisiones y falta de oportunidades de gol.
¡La posesión no es gol!
El torneo comenzó con un mensaje claro de renovación en La Noria. José Paradela, quien había sido presentado apenas un día antes como el fichaje estrella, fue de inmediato incluido en el once titular, lo que demostraba la confianza que Larcamón tenía en él. En los primeros minutos, Paradela se hizo notar, generando conexión con Mateusz Bogusz.
Juntos, parecían tener una química instantánea en el campo, llevando la delantera de La Máquina a crear la primera oportunidad del partido. Sin embargo, el seleccionado nacional Ángel Sepúlveda falló un tiro claro frente a la portería, y así, la ilusión de averiguar si la nueva era de Cruz Azul comenzaría con fuerza se esfumó.
La segunda mitad y la ideas ofensivas
Un par de atajadas destacadas del portero rival, Gutiérrez, evitaron que el marcador se abriera. A pesar de tener el 75% de posesión, la falta de claridad en el juego resultó ser el mayor obstáculo para Cruz Azul. Las llegadas al área rival solo se traducían en frustración, y la afición empezaba a perder la fe.
En la segunda mitad, Larcamón intentó cambiar el rumbo del juego con la entrada de Carlos Rotondi, quien aportó algo de energía al ataque. Sin embargo, el ritmo del partido se desvaneció, y aunque se hicieron intentos, los disparos de Sepúlveda carecieron de la potencia necesaria para hacer temblar a la portería de Mazatlán.
¡El largo camino hacia el gol!
El nuevo jugador Jeremías Márquez entró al juego, pero su presencia apenas se sintió en el terreno de juego, lo que exacerbó el vacío de ideas ofensivas.
Con el pitido final, quedó claro que la esperanza de ver un juego vibrante y lleno de acción había sido reemplazada por un sombrío empate sin goles. Esto marcó el inicio de un nuevo ciclo para Cruz Azul, lleno de promesas pero con un camino aún largo por recorrer.
A medida que el proyecto de Larcamón avanza, la afición debe mantener la paciencia y la fe de que esta historia no termina en un 0-0, sino que con trabajo y tiempo, los goles también llegarán.
